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Venezuela:Chávez enfrenta primera movilización opositora con paro empresarial
- To: <latina@peacelink.it>
- Subject: Venezuela:Chávez enfrenta primera movilización opositora con paro empresarial
- From: "Nello Margiotta" <animarg@tin.it>
- Date: Sat, 1 Dec 2001 11:37:58 +0100
CARACAS, 30 nov (AFP) - Una convocatoria sin precedentes a un paro patronal
que podría derivar en una huelga general el próximo 10 de diciembre enfrenta
al presidente venezolano Hugo Chávez, objeto de crecientes acusaciones de
autoritarismo, a la primera gran movilización de descontento en los tres
años que lleva al frente del gobierno.
Los empresarios venezolanos ratificaron el martes pasado, en una asamblea y
con los brazos en alto, el llamado al paro contra un paquete de 49 leyes,
que Chávez impuso por decreto antes de que expiren los poderes especiales
que le otorgó un año atrás la Asamblea Nacional.
El paro podría ser respaldado por la mayor central obrera, la Confederación
de Trabajadores de Venezuela (CTV), cuyo flamante presidente
socialdemócrata, Carlos Ortega, apareció esta semana en la prensa retratado
con Carmona, ambos con los puños en alto.
La Federación Médica anunció ya que se plegará al paro y que los hospitales
atenderán únicamente las emergencias, mientras se espera una resolución en
esa dirección del sector bancario.
Chávez llamó a una manifestación de partidarios para ese mismo dia y dijo
que el paro era respuesta de la oligarquía a su revolución bolivariana.
La rebelión de la cúpula empresarial nucleada en Fedecámaras se inició el 14
de noviembre, al día siguiente de que Chávez anunciara su paquete de
medidas.
El presidente de ese organismo, Pedro Carmona, negó que el paro tenga un fin
simplemente político: "es de alta política, busca que el gobierno
rectifique", puntualizó.
"No podemos aceptar intervencionismo y discrecionalidad, ni actitudes de
planificación y control total, ajenas al sentir de nuestro pueblo. No
podemos callar ante la violación de la Constitución y las Leyes,
mayoritariamente emanadas del actual Gobierno, ni al irrespeto a la
propiedad privada, a la libertad de trabajo y de elección", acusó el martes
al decidirse la paralización.
"Empresarios (llamó a sus colegas): ya el diálogo no es la vía. El camino
ahora es tanto la rectificación como el exigir el cambio profundo y real del
contenido de estos Decretos Leyes, que subsanen las violaciones al pleno
derecho de la propiedad, al derecho al trabajo, a la inversión, a la
elección y a disentir", agregó.
Un vocero de Fedecámaras puntualizó a la AFP que el organismo agrupa a 242
cámaras y asociaciones de todos los sectores privados (comercio y servicios,
banca, industria manufacturera, telecomunicaciones, sector agríccola,
ganadería y turismo), con más de un millón de empresas que emplean al 80% de
la fuerza laboral activa de Venezuela, cifrada en 11,5 millones de personas.
El Estado emplea al restante 1,3 millones de personas.
La paralización fue explícitamemnte respaldada por la influyente Cámara
Venezolano-Americana de Comercio e Industria (VenAmCham), que destacó su
apoyo a Fedecámaras y a las demás instituciones de la sociedad civil,
sectoriales, regionales y nacionales, en su llamado a protestar "legal y
cívicamente, por medios democráticos, ante actos oficiales inconsultos que
lesionan los intereses del país y violan el ordenamiento legal vigente".
Los empresarios condenan el paquete de leyes aprobado por Chávez por
considerarlo estatista y haber sido aprobado sin consultas en el país.
Entre las leyes aprobadas figuran, además de la de tierras, las de
hidrocarburos, pesca, turismo, transporte, costas y bancos.
Chávez, en respuesta, tronó que el paro es una respuesta de la oligarquía a
su revolución bolivariana, y que los empresarios y los políticos opositores
son "caimanes de un mismo caño (pozo)" en contra de pueblo venezolano.
El mandatario, de 48 años, a contracorriente con los organizadores del paro
que subrayan que no efectarán ningún acto de calle el 10 de diciembre,
convocó a una manifestación de partidarios en Caracas para ese mismo día,
mientras él promulgará la Ley de Tierras, la más impugnada, en su natal y
llanera Barinas (400 km al suroeste de Caracas).
"Conspiradores, daos por derrotados; revolucionarios, a la batalla", llamó
Chávez en una reunión de su partido Movimiento V República (MVR).
Como adelanto de la desobediencia civil, vía huelga, se inició el martes un
paro del sector pesquero, también en protesta contra una ley contenida en el
paquete.
Por su parte, el ahora opositor alcalde mayor de Caracas, Alfredo Peña,
denunció que el gobierno contempla desatar una represión ante el anuncio
oficial de que 2.500 militarizados guardias nacionales y policías del
ejército, aviación y la armada patrullarán también, en combate al hampa, las
calles de la capital y principales ciudades del país.
El desafío empresarial sorprende a Chávez en su peor momento, popular aún
pero con signos de desgaste y virtualmente solo políticamente hacia la
calle, sin su otrora poder de convocatoria que le hizo ganar seis consultas
populares en menos de dos años, y puesto en observación por Washington por
deplorar los bombardeos en Afganistán, aseverando que no se puede combatir
el terror con más terror.
Nello
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