Crisis política podría profundizarse en Argentina

["Nello Margiotta" <animarg@tin.it>]

Por Mario Naranjo

BUENOS AIRES, nov 29 (Reuters) - La crisis política que sacude a Argentina
podría agudizarse este jueves si la oposición cumple con la amenaza de
quedarse con la jefatura de la Cámara de Senadores, cuyo ocupante es el
reemplazante del presidente de la Nación ante la falta de un vicepresidente.
La maniobra es impulsada por el peronismo, la principal fuerza de la
oposición argentina que controla la Cámara Alta, y es otra muestra de la
debilidad del presidente Fernando de la Rúa, que intentó en vano que el
partido fundado por Juan Perón desistiera de su iniciativa, según analistas.
``Lo único que hace el peronismo es ocupar los espacios que el pueblo nos
dio en las urnas: la mayoría de las cámaras del Congreso nacional'', dijo a
una radio el senador peronista Jorge Yoma.
El gobierno calificó la maniobra del peronismo como un ``golpe
institucional'', ya que el presidente del Senado debe reemplazar a De la Rúa
cada vez que viaja al extranjero porque el vicepresidente de la Nación
renunció en octubre de 2000 y no fue reemplazado.
Históricamente, el titular de la Cámara Baja siempre fue del mismo signo
político que el Poder Ejecutivo.
La embestida de la oposición, que se concretaría en la tarde del jueves,
cuando asuman los nuevos senadores electos, se da en momentos en que De la
Rúa lanzó una desesperada convocatoria a la unidad nacional para reconstruir
su devastada base de apoyo tras sus fracasos por reactivar una economía
estancada desde 1998.
El mandatario necesita con urgencia enviar a los mercados una señal de que
su capacidad de gobierno no está herida de muerte y de que puede llevar a
cabo con éxito una masiva reestructuración de la deuda pública para evitar
que el Estado se hunda en uno de los incumplimientos de pagos más grandes de
la historia.
Previsor, De la Rúa ya canceló su nutrida agenda de visitas al exterior
hasta fin de año, con lo que también pretende evitar que los asiduos viajes
fuera del país sigan limando su escasa popularidad.
Según un sondeo realizado en noviembre por la consultora Ricardo Rouvier &
Asociados, la imagen positiva del mandatario es de apenas el 15 por ciento y
la de su gestión de un magro 4,6 por ciento.
De la Rúa, diariamente criticado por la oposición por sus lentas reacciones
antes los problemas que padece el país, asumió en diciembre de 1999 y en su
primera prueba de fuego electoral -los comicios legislativos de octubre
pasado- fue humillado por el peronismo, que no sólo retuvo el Senado sino
que se convirtió también en la primera fuerza de la Cámara de Diputados.
Además, el peronismo, definido como una ``bolsa de gatos'' por sus
detractores debido a sus fuertes divisiones internas, administra 13 de las
24 provincias.
Según el analista Ricardo Rouvier, en el plano institucional no es dramático
que el peronismo se quede con la titularidad del Senado, ya que, si su
ocupante llegara a estar en uso de la presidencia temporaria de la Nación,
no podría tomar ninguna decisión sin el visto bueno del gabinete.
Pero, desde el punto de vista político, demuestra la fragilidad de la
Alianza gobernante, que en los hechos estalló en pedazos en octubre de 2000
cuando el vicepresidente de la Nación -perteneciente a la fuerza más pequeña
de la coalición- renunció disgustado con De la Rúa.
``Constituye una señal política importante. Es una señal del justicialismo
(peronismo) de jaquear al gobierno y, desde el punto de vista del gobierno,
es el punto de mayor debilidad institucional desde que comenzó'' su gestión,
explicó a Reuters Rouvier.
``Es un gobierno desarmado desde el punto de vista político. Lo del
peronismo muestra su incapacidad y la de la UCR (Unión Cívica Radical), que
no hizo nada para evitarlo'', agregó.
Aunque es el partido de De la Rúa y controla la totalidad de los
ministerios, la UCR se muestra distanciada del gobierno para no ligar su
suerte a la del mandatario

Nello

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