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MEXICO:Ataque frontal de Cuba contra Castañeda
Diego Cevallos
MEXICO, 26 mar (IPS) - Las relaciones entre Cuba y México, antes cercanas y
complacientes, entraron en colisión directa de la mano del canciller
mexicano Jorge Castañeda, a quien sus detractores señalan como el malo de la
película.
Los roces entre ambos países subieron de tono tras el abrupto retiro del
presidente cubano Fidel Castro de la Conferencia Internacional sobre
Financiación para el Desarrollo, celebrada la semana pasada en la
nororiental ciudad mexicana de Monterrey.
Las nuevas fricciones coinciden con las sesiones de la Comisión de Derechos
Humanos de la Organización de las Naciones Unidas (ONU), cuyo periodo anual
comenzó el día 18 en Ginebra, donde circulan propuestas de resolución en las
que Cuba aparece en la mira por presuntas violaciones de los derechos
básicos.
México no omitirá ningún señalamiento sobre violaciones a los derechos
fundamentales en otras partes del mundo, advirtió Castañeda este martes en
Ginebra.
En círculos diplomáticos locales se indica que México está dispuesto a
apoyar una iniciativa del gobierno chileno para pedir a Cuba que reciba una
misión de trabajo encabezada por la Alta Comisionada de las Naciones Unidas
para los Derechos Humanos, Mary Robinson.
Arrogante, deshonesto, intrigante, soberbio, diabólico, cínico y
maquiavélico son algunos de los adjetivos usados este jueves por el diario
oficialista cubano Granma para referirse a Castañeda, quien en sus 49 años
ha desarrollado una amplia carrera de escritor, profesor universitario,
analista político e impulsor de iniciativas políticas en América Latina.
Según Cuba, Castro dejó Monterrey antes de que finalizara la Conferencia
debido a presiones de Estados Unidos, que le fueron comunicadas por personas
"muy autorizadas" del gobierno mexicano.
Sin embargo, el presidente de México, Vicente Fox, y el mismo Castañeda
señalaron que no hubo tal presión y sus portavoces retaron a La Habana a
mencionar nombres.
Cuba no ha cumplido con el desafío, aunque el editorial de Granma, del
gobernante Partido Comunista, sostiene que La Habana "posee pruebas
irrebatibles de todo lo ocurrido".
"Creo que los días de Castañeda en la cancillería mexicana están contados
por el episodio con La Habana y por otros", dijo a IPS el escritor Lisandro
Otero, viceministro de Cultura de Cuba entre 1966 y 1970 y diplomático hasta
1980.
Pero no todos los analistas piensan así. Castañeda tiene una posición firme
y su influencia es una de las más importantes en el gobierno de México,
aseguró el escritor Héctor Aguilar.
La pregunta que se hacen los observadores es si el gobierno de Fox está
dispuesto a despedir a Castañeda para complacer a Cuba y recomponer una
relación que ha sido tradicionalmente cercana, o si mantiene a toda costa a
uno de los funcionarios de mayor brillo internacional.
La asistencia de delegaciones de más de 170 países a la conferencia de
Monterrey, entre ellas la presencia de unos 50 mandatarios, demostró lo bien
que hace su trabajo Castañeda, opinaron diputados del conservador Partido
Acción Nacional, al que pertenece Fox.
Una de las medallas que los expertos ponen al canciller es la cercanía
diplomática que ha logrado establecer con el gobierno de Estados Unidos y su
entereza para que un asunto como la emigración de mexicanos indocumentados a
ese país ocupe los primeros planos de esa relación.
Sus posturas cercanas a Washington, que contrastan con su pasado militante
en fuerzas de izquierda, son motivo de mofa e ironía de parte de numerosos
caricaturistas locales, además de duras críticas de políticos izquierdistas.
Granma señaló que Castañeda buscó en sus "años mozos", y obtuvo, preparación
militar en Cuba para participar en fuerzas revolucionarias en América
Central.
Hoy, el canciller mexicano se ha "convertido en instrumento de los planes
imperialistas contra Cuba", "más por ambición y vanidad que por odio o
ideología que nunca tuvo ni tendrá", apuntó Granma.
Castañeda había declarado al diario español El País que se consideraba "un
hombre de izquierdas, pues lo he sido toda mi vida y lo sigo siendo".
Los roces de Castañeda con Cuba se remontan a comienzos de los años 90,
cuando comenzó a expresar posiciones críticas hacia ese país y debió
enfrentar la censura de La Habana para revisar archivos relacionados con la
vida del guerrillero argentino Ernesto "Che" Guevara, muerto en 1967 y sobre
quien escribió un libro.
Diputados opositores de Fox pidieron en el Congreso legislativo la renuncia
inmediata del canciller por los problemas que ha provocado en las relaciones
con Cuba.
México fue el único país de América Latina que no rompió relaciones con Cuba
en los años 60 y nunca criticó, con el argumento del derecho a la libre
determinación de los pueblos, el sistema socialista de la isla.
Las relaciones de México con Cuba ya no son con una revolución, sino con una
República, señaló Castañeda. Para Granma, esta posición es parte de las
"declaraciones enigmáticas y extrañas" del canciller mexicano.
Los problemas entre los dos países, cuyas relaciones diplomáticas suman un
siglo, empezaron en abril de 2000, cuando Cuba acusó a Castañeda de
gestionar en la Comisión de Derechos Humanos de la ONU una posición de
censura contra el gobierno de Castro.
Este año, Fox decidió recibir a opositores a Castro en el marco de una
visita a Cuba, luego ocurrió la ocupación de la embajada mexicana en La
Habana por parte de 21 cubanos, más tarde desalojada en acuerdo entre ambos
gobiernos, y finalmente la postura de Castro en Monterrey.
En todos los episodios, el culpable es Castañeda, afirmó el gobierno cubano.
(FIN)
Nello
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possible
www.peacelink.it/tematiche/latina/latina.htm