El gobierno venezolano no ha prohibido la emisión de la cadena opositora Globovisión



5 de octubre del 2003

Los directivos suspendieron la programación para acusar a Chávez de atentar
contra la libertad de expresión


Pascual Serrano
Rebelión


El Ministro de Comunicaciones e Información venezolana, Jesee Chacón, ha
aclarado que el gobierno venezolano no ha impedido ni suspendido en ningún
momento las emisiones del canal opositor de televisión Globovisión. La
acción gubernamental se ha limitado a requisar algunos equipos debido al uso
fraudulento que se estaba haciendo del espectro radiofónico, algo totalmente
previsto por la ley.

Fuentes gubernamentales venezolanas han afirmado desconocer las razones por
las que Globovisión dejó de salir al aire, ya que los técnicos de la
Comisión Nacional de Telecomunicaciones (CONATEL), no tomaron ninguna medida
para impedir la salida al aire de la emisora. Todo parece indicar que
Globovisión desconectó su señal a propósito para organizar un escándalo y
culpar a CONATEL de atropellos contra la libertad de expresión.

Al parecer la emisora opositora utilizaba frecuencias de transmisión
ilegalmente al no tener los correspondientes permisos. Según el ministro,
"si ellos hubieran hecho los trámites legales, no habrían tenido el problema
que están teniendo hoy. Desde hace tres años cuando se hizo un censo, ellos
estaban utilizando ilegalmente esas porciones del espectro de ondas que hoy
son objeto de procedimiento administrativo".

El Ministro de Comunicación e Información aclaró que el proceso
administrativo que actualmente está ejecutando la Comisión Nacional de
Telecomunicaciones contra el canal Globovisión, no tiene ningún tipo de
relación contra la libertad de expresión, sino con el uso ilegal del
espectro radioeléctrico, tal como lo estipula la Ley Orgánica de
Telecomunicaciones.

Según el ministro, el comiso de un equipo de microondas de este canal de
televisión privado "es producto de un trabajo que viene haciendo CONATEL de
ordenamiento del espectro radioeléctrico en Venezuela desde el año 2001,
cuando se realizó el primer censo. Se han hecho una serie de inspecciones
para precisar qué partes del espectro radioeléctrico se están utilizando
ilegalmente y qué operadores están allí".

El problema es que esta empresa utiliza unas ondas radioeléctricas de manera
ilegal. En Venezuela para hacer uso del espectro radioeléctrico se necesita
un permiso, ese permiso lo entrega la Comisión Nacional de
Telecomunicaciones (CONATEL).

Además, el ministro aseveró que "la Ley Orgánica de Telecomunicaciones
establece que en Venezuela está prohibido el uso ilegal del espectro
radioeléctrico y en este caso, CONATEL está actuando totalmente apegada a
derecho, abrió un procedimiento administrativo el cual dictó una medida
cautelar que tiene que ver con el comiso de un equipo que está utilizado de
manera ilegal".

También aprovechó la oportunidad para resaltar que "al abrirse el
procedimiento, la empresa Globovisión, en vez de tomar las acciones legales
correspondientes, ha hecho de todo esto un escándalo alegando que es un
atentado contra la libertad de expresión y la pregunta que uno se hace es
¿Qué tiene que ver la libertad de expresión con el uso fraudulento del
espectro? Los directivos de la emisora ya conocían el uso ilegal de las
ondas desde el momento que se hizo el censo y posteriormente en dos
inspecciones que CONATEL le realizó". "Si ellos hubiesen solicitado las
habilitaciones oportunas para el uso debido de las microondas no hubiera
existido ningún problema", añadió.

La empresa, continuó, conociendo su uso ilegal del espectro, no tomó las
medidas para corregir esta anomalía y el Estado, actuando de la única manera
en la que puede actuar, abrió un procedimiento para demostrarlo porque "en
cualquier país del mundo se necesita autorización para operar una frecuencia
de microondas".

No es la primera ocasión que Globovisión ha esgrimido la libertad de
expresión para burlar la legislación venezolana, ya anteriormente se le
abrió un procedimiento administrativo por haber dejado pagar los impuestos y
también denunciaron públicamente un ataque a la libertad de expresión.

Es de destacar la precipitada reacción de la Corte Interamericana de
Derechos Humanos que ordenó "medidas cautelares a favor de Globovisión para
que se suspenda la incautación de equipos y estos sean restituidos en
beneficio al derecho a la información de todos los venezolanos". Algo
sorprendente puesto que ningún gobierno ha suspendido su emisión y la
emisora no solicitó permiso alguno para emitir en la onda que estaba
utilizando.

La reacción en esta ocasión de la Corte Interamericana resulta paradójica
tras no haberse pronunciado cuando el alcalde opositor Alfredo Peña sí
clausuró la televisora comunitaria Catia TVe y todos sus equipos fueron
confiscados. Al día de hoy Catia TVe no ha podido volver al aire mientras
Globovisión sí lo está.

La oposición a Chávez no ha tardado en reaccionar con violencia a las
medidas gubernamentales. El la madrugada del sábado se produjo una explosión
que destruyó la puerta principal de la sede de la Comisión Nacional de
Telecomunicaciones CONATEL en el sector de clase alta Las Mercedes al este
de la cuidad.

También el día anterior, el personal de CONATEL fue agredido por una
enardecida turba de manifestantes opositores, quienes lanzaron piedras y
bombas de pintura.

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