Oposición venezolana en su peor momento mientras se desmorona el paro



Javier Rodríguez

Caracs, 1 feb (PL) La oposición venezolana atraviesa su peor momento en
mucho tiempo mientras se desmorona el paro nacional convocado por ella y
sufre un golpe a sus esperanzas de una inmediata presión foránea sobre el
gobierno.
Como un castillo de naipes que se derrumba, la paralización parcial lograda
por los adversarios del presidente Hugo Chávez en sectores de la industria,
el comercio y los servicios, parece destinada a una casi inmediata
desaparición.
En menos de 48 horas se anunció el reinicio a la normalidad de la banca
privada y los supermercados, sectores que trabajaban en un horario
restringido como cooperación al intento de una huelga iniciada hace dos
meses bajo la seguridad de provocar en pocos días la dimisión del Jefe de
Estado.
Como si ello fuera poco, las universidades privadas y buena parte del
minoritario grupo de escuelas particulares que se mantenían fiel a la
huelga, informaron la apertura de las aulas a partir de la próxima semana.
Igualmente lo hicieron las grandes tiendas por departamentos y las cadenas
de cinematógrafos adheridas al paro desistieron de su actitud y se
incorporarán pronto al servicio a la población, no sin comprobar antes las
grandes pérdidas sufridas durante los meses de diciembre y enero pasados.
Otro tanto sucederá con las franquicias, establecimientos que representan a
firmas internacionales, especialmente dedicadas aquí a la venta de comidas
rápidas, así como los espectáculos deportivos a reanudarse también en la
próxima semana.
Industrias que estaban cerradas comenzaron ya a prepararse para reanudar la
producción y hasta las emisoras de televisión privadas, férreas opositoras a
Chávez, volveran a presentar programas de entretenimiento y cuñas
comerciales, borradas hace más de 60 días de la pantalla chica.
Esto se une a los ya públicos avances del gobierno en la normalización de la
industria petrolera con el aumento de la proudcción diaria a millón y medio
de barriles de crudo y el mejoramiento del suministro de gasolina al mercado
interno.
En el plano político, el sueño opositor hecho público en los últimos días de
lograr un planteamiento crítico contra el Ejecutivo por parte de los
vicecancilleres del Grupo de Amigos de Venezuela que visitaron el país, se
esfumó al terminar ellos su estancia aquí en el dia de hoy.
Una declaración de esos funcionarios, que se entrevistaron durante casi
cuatro horas con el presidente Chávez, ratificó la legitimidad del gobierno
y su interés en una solución de la crisis actual, además de apoyar la tesis
oficial de buscarla en el marco de la Constitución.
Incluso, llamó a los militantes medios de difusión privados a cooperar en el
logro de un clima de entendimiento, evidentemente alejándose de su duro
lenguaje opositor actual.
La solución debe darse entre los venezolanos y en el respeto a la soberanía
del país, dijo el Grupo finalmente, palabras muy lejanas de las que
esperaban oir quienes se oponen al Presidente.


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Nello

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