MENSAJE DE NAVIDAD 2004 COMUNIDADES DE FE Y VIDA DE EL SALVADOR COFEVI Gracia y Paz a los hombres y mujeresque
resisten contra el imperio en todo el planeta... Hermanas y
hermanos: Nuestro
Padre celestial nos ha concedido un año más de lucha en esta tierra nuestra,
latinoamericana, lugar de encuentro entre Dios y nuestro pueblo, que marcha
hacia la liberación del pecado de la opresión. Con mucha
alegría nos disponemos a proclamar de nuevo como Rey de reyes al niño campesino
que nacerá en Belén y que luego será refugiado, joven rebelde, organizador y
educador popular, activista social, prisionero político, torturado,
crucificado, y que desafió al imperio y resucitó al tercer día. Con mucha
devoción nos preparamos para celebrar la Noche Buena, la Noche popular y
democrática, la noche en que desde la pobreza y la exclusión representada por
un pesebre, surge la luz que ilumina a la humanidad con la dignidad de la
esperanza. En el estaba la vida y la vida es la luz de los hombres. Con mucha
fe, con nuestros corazones inundados de entusiasmo gritamos desde los balcones
de nuestra historia de opresión y rebeldía: En el nombre del Padre, y del Hijo,
y del Espíritu Santo, estamos seguros que los pueblos unidos, derrotaremos a la
Bestia de la globalización neoliberal. Señor, danos fuerza para hacerlo. Con todo
nuestro amor, que es un misterio y
don de Dios, caminamos junto con Jesús
por las aguas del compromiso, haciendo la voluntad de nuestro Padre,
luchando por la justicia y la paz, por los derechos de nuestros huérfanos y
nuestras viudas, y nos preparamos para expulsar a los mercaderes del Templo con
el látigo de la solidaridad y la dignidad. Padre
nuestro que estas en los cielos, concédenos la fuerza y la inteligencia, la
mirada estratégica, el pan de la amistad, el vino de la resistencia, la sonrisa
de la victoria y la seguridad de
caminar siguiendo tus pasos, de rebelde que prefirió la muerte en cruz, con
dignidad, con principios, a una
vida de sumisión, arrodillado a los caprichos de los poderosos dueños del
imperio. Con tu
ejemplo de pastor caminando por las calles de Jerusalén y por los campos de
Galilea, te suplicamos que como Comunidades de Fe y Vida, nos concedas cumplir
nuestra misión de ser sal y luz, de luchar y vencer, de orar y actuar, de
perdonar y obedecer tu palabra de verdad y de justicia, así como lo hiciste con
nuestra hermana Concepción Palma, de Chalatenango, a quien en este año llamaste
a tu presencia. ¿Gloria a
Dios en las alturas y paz a los hombres y mujeres que siguen tu ejemplo de
lucha y resistencia! Protege
Señor a nuestros cinco hermanos cubanos que están en las cárceles del imperio,
con la frente en alto como les enseñó Martí; permite que regresen pronto a sus
hogares y familias, a su digna patria socialista. Protege Señor
a nuestro hermanos y hermanas que en Irak resisten con las armas en la mano,
las agresiones de un imperio cruel, que sacrifica por el petróleo, la sangre de
miles de mártires de ese pueblo heroico. Protege
señor a nuestros hermanos y hermanas de Puerto Rico, isla de la resistencia
frente al imperio, que el sagrado sueño de la independencia siempre ilumine las
conciencias de ese pueblo hermano. Protege
Señor a nuestro pueblo salvadoreño, ten misericordia de nosotros y permite que
tengamos la fuerza y la voluntad para rechazar el TLC recientemente aprobado, y
para luchar siempre por una vida digna. Todo esto
te lo pedimos en el nombre de ese niño Jesús que pronto nacerá y que es ya
esperanza de lucha y de nuevas victorias para nuestros pueblos oprimidos. Y el Verbo
se hizo resistencia y habitó entre nosotros y nosotras San
Salvador, 19 de diciembre de 2004 Rev.
Ricardo Cornejo
Rev. Roberto Pineda
Rev. Alex Orantes Licda.
María Isabel Villegas Pastora Eufrasia Abrego Pastor
Efraín Cerna
Pastor José Santos Merches |