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Argentinos aumentan acciones contra el ALCA



Buenos Aires, 19 nov (PL) Los argentinos incrementan hoy sus protestas en
contra del proyectado Acuerdo de Libre Comercio de las Américas (ALCA) y
tocan las puertas del gobierno para ratificar su rechazo a ese tratado
impulsado por Estados Unidos.


Mientras en Miami delegaciones de los países involucrados en ese esquema
tratan de definir posiciones en medio de la intransigencia norteamericana en
materia de subsidios agrícolas, en Buenos Aires se multiplican las acciones
opuestas a la firma de ese pacto.



En ese sentido, una representación del grupo Autoconvocatoria No al ALCA,
encabezada por el Premio Nobel de la Paz-1980, Adolfo Pérez Esquivel, se
reunió la víspera aquí con el canciller argentino, Rafael Bielsa, para
denunciar las consecuencias que el ALCA tendrá para los pueblos de América
Latina.



Según se informó oficialmente, en ese encuentro, el ministro se comprometió
a defender los intereses de este país en las negociaciones de Miami y se
manifestó dispuesto a ampliar el debate sobre el tratado dentro de la
sociedad argentina.



Por su parte, el laureado defensor de los derechos humanos dejó en claro la
preocupación de buena parte de la población ante la firma de "un acuerdo que
pone en juego la soberanía y la dignidad del país".



También ayer se conoció una declaración de la Conferencia Episcopal
Argentina en la cual un centenar de obispos alertaron acerca del peligro de
que el pretendido acuerdo continental quede enmarcado en "el desequilibrio
de intereses y poderes" que existe entre las naciones del continente.



Al respecto, sostuvieron que ese desbalance puede traer consecuencias muy
graves, especialmente en relación con la identidad cultural, los puestos de
trabajo y la misma subsistencia de las economías más frágiles".



Los religiosos dijeron que, de llevarse a la práctica, el ALCA debe fundarse
en el respeto de la soberanía integral de cada nación y en la inviolabilidad
de los derechos humanos y servir para "consolidar las estructuras
democráticas y participativas" en la región.



Además opinaron que entre los objetivos del ALCA debe figurar el respeto de
la soberanía de las naciones, el desarrollo integral y la mejor calidad de
vida de "todos los pueblos signatarios y de todos los sectores y personas
que los componen, y no sólo de algunos pocos".



Las expresiones contrarias al tratado continental crecen aquí a medida que
se acerca el comienzo mañana de una consulta popular nacional sobre el ALCA,
la deuda externa y la militarización de Latinoamérica convocada por la
Autoconvocatoria No al ALCA.



Ese grupo reúne a cientos de organizaciones de todo tipo de la sociedad con
el propósito de articular propuestas y esfuerzos contra el proyectado
acuerdo continental y a favor de la integración de los pueblos de América
Latina y el Caribe.



La realización de la votación fue acordada en abril pasado por la Segunda
Asamblea Nacional de Lucha contra el ALCA y se integra al movimiento que se
ha estructurado con ese objetivo a nivel latinoamericano.



Parejamente, diferentes movimientos de campesinos, trabajadores desocupados,
de derechos humanos y sindicales confirmaron la realización de una marcha de
repudio al ALCA el viernes próximo.