BRASIL:Avance moderado de mujeres

["Nello Margiotta" <animarg@tin.it>]

Mario Osava

RIO DE JANEIRO, 9 oct (IPS) - Las mujeres brasileñas conquistaron ocho
escaños del Senado y 43 de la Cámara de Diputados en las elecciones del
domingo, un avance considerado importante aunque su representación sigue
siendo muy limitada.

La cantidad de senadoras pasó de cinco a 10, al sumar ocho a las dos
legisladoras que tienen mandato aún por cuatro años más, totalizando 12,3
por ciento de ese cuerpo de 81 miembros, mientras que las diputadas apenas
ocupan 8,4 por ciento de los 513 escaños.

En las elecciones generales del domingo se renovaron todos los cargos de
diputados y los dos tercios de la Cámara de Senadores, que tienen mandato
por ocho años. El tercio restante de senadores se cambiará en los comicios
de 2006.

Esas cifras pueden alterarse, porque el escrutinio finalizado este miércoles
sigue sujeto a revisiones a pedido de los partidos y, además, algunos
nombres no permiten identificar el sexo con seguridad, dijo a IPS la
socióloga Almira Rodrigues, una de las directoras del Centro Feminista de
Estudios y Asesoría (Cfemea).

La organización no gubernamental Cfemea, con sede en Brasilia, acompaña las
cuestiones políticas de interés femenino, incluyendo la evolución de los
proyectos de ley en el Congreso Nacional.

El desempeño de las mujeres fue esta vez mejor aún si se comparan las
elecciones anteriores, ya que en 1998 fueron elegidas sólo 29 diputadas, lo
cual representa ahora un aumento de 48,3 por ciento.

Pero la cantidad de mujeres ya había crecido hasta completar 33 en los
últimos cuatro años en la Cámara de Diputado, que se renovó en su totalidad
el domingo, debido a que reemplazaron a hombres que abandonaron sus puestos
para ocupar funciones ejecutivas, como alcaldías y ministerios.

El sector que más contribuyó al avance femenino en el parlamento fue el
Partido de los Trabajadores (PT), que triplicó sus diputadas, al elegir 15
en los comicios del domingo.

Ese "extraordinario" crecimiento femenino se debe al sorprendente avance
electoral del mayor partido de izquierda del país, impulsado en gran parte
por el liderazgo de su candidato a presidente de Brasil, el ex obrero y
sindicalista Luiz Inácio Lula da Silva.

Lula resultó el candidato más votado, con 48,4 por ciento de los votos
positivos (dejando de lado los sufragios nulos y en blanco), y disputará el
27 de este mes la segunda vuelta presidencial con el socialdemócrata José
Serra, el economista y ex ministro de Salud que alcanzó 23,2 por ciento.

El aumento de la bancada femenina se registró casi exclusivamente en los
partidos de oposición al actual gobierno de Fernando Henrique Cardoso, de
manera que la izquierda será mayoría entre las diputadas que asumirán sus
cargos en febrero, destacó Rodrigues.

Otro dato destacado de las últimas elecciones fue que en ocho de las 27
circunscripciones --26 estados y un distrito federal-- la mayor votación
para diputados fue obtenida por mujeres. Además, esta vez fueron elegidas
diputadas en representación de 11 partidos, frente a siete en l998.

De ese modo, los avances se lograron en la cantidad total de parlamentarias,
en la votación obtenida y en la ampliación partidaria y geográfica, es decir
que aumentaron los partidos y estados que contarán con diputadas y
senadoras, observó la directora de Cfemea.

Rodrigues señaló que, aunque el resultado fue excelente, aún se está lejos
de la meta buscada de por lo menos 30 por ciento de mujeres en el Congreso.

Los partidos políticos deberían destinar 30 por ciento de sus candidaturas
parlamentarias para las mujeres, pero ninguno cumplió la cuota recomendada
desde 1996.

Además, las candidatas cuentan con menos recursos para sus campañas que los
hombres. Es como "empezar una carrera con mucha distancia de desventaja",
comparó Rodrigues.

La experta indicó que serán necesarias para alcanzar ese objetivo "más
acciones afirmativas", un tratamiento especial, cursos de capacitación y
mayor inversión de los partidos en sus candidatas.

Mientras, en peor situación que las mujeres aparecen los indígenas, que no
lograron elegir ninguno de sus 21 candidatos a diputados nacionales o
estaduales.

José Adalberto da Silva, candidato en el septentrional estado de Roraima,
estuvo a un paso de llegar a la Cámara de Diputados.

Cuando ya todos los daban como el segundo indígena en ser elegido
representante nacional, las tres últimas urnas del escrutinio frustraron el
sueño al faltarle sólo 74 votos de los 2.365 necesarios.

Este líder indígena del grupo Macuxi y candidato del Partido Comunista de
Brasil, apoyado por una coalición de izquierda, dijo a IPS que aún conserva
una remota esperanza de alcanzar la banca con los votos que puedan surgir de
la revisión de urnas impugnadas, un proceso que llevará unos 15 días.

Su propuesta era defender en Brasilia programas de desarrollo agrícola, mas
educación y apoyo para las poblaciones indígenas de las zonas rurales, los
bosques y las ciudades. Pero "la lucha no acabó, habrá nuevas elecciones",
sostuvo.

Silva quedó como primer suplente de la diputada por Roraima de la coalición
que lo postuló a ambos.

Otro indígena, Antonio Ferreira da Silva, de la tribu Apurinam, será también
el segundo suplente de la senador Marina Silva, del otro estado amazónico,
Acre. Pero es muy difícil que alguno de ellos pueda asumir el cargo en la
legislatura.

Hasta ahora sólo un representante indígena llegó hasta el Congreso Nacional
en la historia de Brasil. Se trataba de Mario Juruna, del grupo Xavante,
elegido en 1982 por el estado de Río de Janeiro, quien no logró repetir en
las elecciones siguientes y falleció a comienzos de este año en Brasilia.

En Brasil existen casi 350.000 indígenas en la actualidad, mientras que a la
llegada de los portugueses en 1500 sumaban unos cinco millones

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Nello

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