COLOMBIA:ELECCIONES-Grupos armados presionan por sus candidatos

["Nello Margiotta" <animarg@tin.it>]

Yadira Ferrer

BOGOTA, 8 mar (IPS) - Guerrilleros de izquierda y paramilitares de derecha
aumentaron su presión sobre candidatos y votantes al acercarse las
elecciones legislativas de este domingo, para imponer a sus propios
aspirantes.

Las paramilitares Autodefensas Unidas de Colombia (AUC) mantienen fuerte
influencia sobre zonas como el Magdalena medio, una rica área ganadera del
centro del país, y los septentrionales departamentos de Magdalena y Córdoba,
donde a muchos candidatos les ha sido imposible realizar su campaña.

Salvatore Macuso, uno de los comandantes de las AUC, aseguró públicamente
hace algo más de un mes que "el poderío" de su organización "se verá
reflejado políticamente con más de la tercera parte de los escaños del
Congreso", aunque ningún candidato ha reconocido vínculos con esa
organización.

Así mismo, esta semana se conoció una amenaza de las Fuerzas Armadas
Revolucionarias de Colombia (FARC) contra el aspirante indígena Jesús
Piñacue, quien pretende retener su escaño en el Senado y es uno de los
favoritos en las encuestas.

Piñacue, líder del movimiento de resistencia cívica del suroccidental
departamento del Cauca, cuya población es mayoritariamente indígena, fue
declarado objetivo militar por las FARC, que también amenazaron a 11
alcaldes de esa región.

La campaña electoral fue desarrollada en un ambiente enrarecido por la
violencia, que se agravó con la ruptura de las negociaciones de paz entre el
gobierno y las FARC y a causa del secuestro de la candidata presidencial
independiente Ingrid Betancourt.

Los recintos cerrados, los vídeos y los helicópteros reemplazaron a los
actos proselitistas públicos y a las caravanas de candidatos por el interior
del país.

Las AUC tienen 11.000 hombres en armas, según ha asegurado su jefe, Carlos
Castaño, y las FARC, su principal enemigo, unos 18.000.

"Hay un 'paraestado' en el norte dirigido por los paramilitares, y otro en
el sur, controlado por la guerrilla", señaló a IPS Luis Eduardo Garzón,
candidato por el izquierdista Frente Social y Político para los comicios
presidenciales del 26 de mayo.

Y en el centro, el Estado colombiano "está representado por el alcalde de
Bogotá, Antanas Mockus. El Estado en su conjunto que debería estar dirigido
por el presidente Andrés Pastrana no existe", afirmó Garzón, un ex
sindicalista.

Carlos Gaviria, aspirante al Senado por el Frente Social y Político,
advirtió que ningún candidato ha tenido suficientes garantías en la campaña
para las elecciones del domingo, en las que estarán en juego los 102 escaños
del Senado y los 166 de la cámara de diputados.

El opositor Partido Liberal presenta el bloque mayor en el parlamento
saliente.

"Uno sabe que el Estado no puede suministrar escoltas a todos, sabe que está
en peligro, que está expuesto", dijo a IPS el abogado Gaviria, que sostiene
que es necesario hacer un esfuerzo mental para afirmar que habrá elecciones
democráticas.

La democracia implica un plano de igualdad, pero algunos candidatos,
apoyados por grupos políticos de fuerte financiamento, tuvieron protección
de guardias privados. En cambio, "nosotros trabajamos con las uñas
(desprotegidos)" dijo Gaviria.

Las denuncias sobre el ingreso de dinero del narcotráfico en la campaña han
sido otra constante.

"No tenemos dinero para pagar una campaña, es difícil competir", señaló
Elides Pachené, un indígena que aspira a ingresar en la cámara de diputados.

Pachené quiere aplicar en otras zonas del país la experiencia de los
indígenas del Cauca, que lograron resistir a los grupos armados. "Hay que
sembrar unidad", afirmó.

Veintitrés millones de colombianos están habilitados para votar. Se espera
que la abstención, históricamente superior a 50 por ciento en elecciones
parlamentarias, pues la mayoría de la población desconfía del Congreso, sea
menor en esta ocasión.

Las encuestas para los comicios legislativos están encabezadas por
candidatos pacifistas, aunque para las elecciones presidenciales de fines de
mayo, el favorito es Alvaro Uribe, un disidente del Partido Liberal que
propone medidas de fuerza para poner fin al conflicto armado.

Esa aparente contradicción "es reflejo de la confusión ideológica que viven
los colombianos", opinió Daniel García-Peña, que se postula a la cámara de
diputados.

"Tal vez hay una racionalidad subliminal cuando la gente piensa votar por un
presidente de mano dura y un Congreso que sirva de freno, que dé equilibrio
y haga contrapeso", admitió García-Peña, ex asesor gubernamental de paz.

Por su parte, Gaviria comentó en alusión a Uribe que "las propuestas
autoritarias pueden llevar a regímenes restrictivos de libertades".

Uribe también preconiza una reforma política que puede implicar la
revocación del mandato del Congreso elegido el domingo. Según ha anunciado,
someterá su proyecto a plebiscito en caso de ganar las elecciones de mayo.

"Una vez modificada la estructura del Congreso se miraría cuál debe ser el
camino y la fecha para elegir un nuevo Congreso sin atropellar ni defraudar
a la opinión pública", ha dicho Uribe.

Algunos comentaristas consideran que ese proyecto no será necesario, pues en
su opinión, los colombianos pueden relegar este domingo a los candidatos de
las maquinarias políticas.

Pero otros han advertido que los vicios de la democracia colombiana siguen
vigentes. Se calcula que la mitad de la votación en Bogotá estará viciada,
entre otras razones por la compra-venta de votos.

García-Peña cree que las listas independientes van a obtener una alta
votación, pero lejos del apoyo que obtendrán los candidatos de los partidos
tradicionales, el Liberal y el gobernante Conservador, que otra vez
presentarán múltiples listas en varios distritos, para aumentar su poder de
captación de votos.

En las listas figuran candidatos investigados penal o disciplinariamente y
69 senadores que aspiran a su reelección. Ocho de ellos llevan mas de 20
años en el parlamento.

"Con el dinero que está girando el gobierno se está fomentando la reelección
de los actuales congresistas", aseguró a IPS Rafael Pardo, candidato liberal
al Senado y aliado de Uribe.

También hay candidatos secuestrados. Es el caso del liberal Luis Eladio
Pérez, uno de los seis congresistas en poder de las FARC. Su familia conduce
la campaña por la reelección de Pérez.

"La democracia no puede arrodillarse ante los guerrilleros", afirmó el
empresario periodístico Guillermo Cortés, compañero de lista de Pérez y que
también estuvo secuestrado por las FARC(FIN)

Nello

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