Colombia: Il Governo qualifica"poco serie" le condizioni delle FARC

["martinerrico" <martinerrico@libero.it>]

http://eltiempo.terra.com.co/21-10-2001/poli119757.html

Gobierno califica de 'poco serias' condiciones de las Farc para
continuar proceso de paz
 
El Comisionado para la Paz, Camilo Gómez, calificó de 'poco serias' las
cuatro últimas cartas de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia
(Farc) en las que plantean condiciones para mantener los diálogos. En la
última de ellas, las Farc exigieron :

- Que se suspendan los sobrevuelos a cualquier altura sobre la zona del
despeje y se prorrogue la zona de despeje hasta el 7 de agosto del 2002.

- Que se retiren las unidades militares que están en los alrededores de la
zona de distensión.

- Que el Gobierno acabe con el paramilitarismo, como condición para hablar
del cese del fuego y de hostilidades.

- Que se suspendan las órdenes de captura contra los miembros del
Secretariado.

- Que los tres meses de prórroga de despeje sean empleados para comprobar la
eficacia de las Fuerzas Armadas en su lucha contra el paramilitarismo.

Gómez le respondió ayer a ŒManuel Marulanda¹, máximo jefe de las Farc, que
el Gobierno está cumpliendo su palabra y espera que ellos cumplan con lo que
firmaron en el acuerdo de San Francisco de la Sombra.
En carta abierta a Marulanda, Gómez agrega que las Farc quieren dilatar el
proceso y no dar cumplimiento a lo ya firmado. Reitera, además, que todas
las medidas tomadas para controlar la zona de distensión se mantendrán
"mientras las Farc continúen con el secuestro, la extorsión, los ataques a
la población civil y las demás acciones violentas".
Con su misiva, Gómez dio respuesta a cuatro cartas enviadas por las Farc en
la semana que termina, incluida una conocida ayer en la que plantean cinco
condiciones para mantener los diálogos.
El Comisionado califica en la carta como "disculpa para no cumplir con lo
acordado" la petición sobre las órdenes de captura en contra de miembros del
secretariado de las Farc, porque no son las primeras que se dan.
Gómez, además, le recuerda a ŒMarulanda¹ que el Gobierno ha adelantado una
dura lucha contra los grupos de autodefensas o paramilitares, obteniendo
"más resultados que en ninguna otra época".
El Comisionado rechaza el argumento de las Farc que señala a políticos,
dirigentes gremiales y medios como causantes de la crisis del proceso de paz
por sus críticas al mismo, diciendo que "el diálogo y la negociación no se
defienden cuestionando a los que lo critican" .
Gómez sale en defensa de la unidad de las diversas fuerzas democráticas del
país en torno del propósito de la paz: "Las Farc pueden tener la certeza que
de este lado de la Mesa existe un compromiso real con la búsqueda de la paz
y que son vanos sus intentos por fracturar esa unidad y generar divisiones
entre quienes representamos el sistema democrático".
Las exigencias, en detalle

Las exigencias, que están contenidas en una declaración firmada por Los
voceros de las Farc, ŒRaúl Reyes¹, ŒJoaquín Gómez¹, ŒSimón Trinidad¹,
ŒAndrés París¹ y ŒCarlos Antonio Lozada¹, se anticiparon a la respuesta que
el Gobierno debía dar en los próximos días a tres cartas de las Farc dadas a
conocer la semana pasada, en las que planteaban, fudamentalmente, reparos a
los controles en los alrededores de la zona de distensión.
Gómez se preparaba a viajar a la zona del despeje para llevar la respuesta
del presidente Andrés Pastrana a las tres cartas, que habían dejado en un
punto crítico las negociaciones. 


Suspensión de sobrevuelos y controles

Los voceros de las Farc dejan entrever que la continuidad del proceso
depende de que el Gobierno suspenda los sobrevuelos de aeronaves a cualquier
altura y de que prorrogue la zona de despeje hasta el término de su mandato
(7 de agosto del 2002).  Si ello ocurre, dicen los voceros, ³ahí estaremos
en primera línea². 
Así mismo, exigen al Ejecutivo levantar las unidades militares ubicadas en
los alrededores del área de despeje. 
³Las unidades militares disfrazadas de paramilitares y ubicadas en los
alrededores de la zona desmilitarizada, en lugares que nosotros señalaremos,
no dejan de ser un grave peligro para la movilización de los guerrilleros y
la población civil en la zona despejada. Por lo tanto tendrán que ser
levantadas², aseguran los voceros. 
Las Farc afirman en su declaración que cuando se firmó el Acuerdo de San
Francisco de la Sombra no existían los condicionamientos y controles a la
zona desmilitarizada, anunciados por el presidente Pastrana en una reciente
alocución televisada.  
Sin embargo, el propio Presidente, después de recibir las tres misivas de
las Farc, aseguró que tales controles han existido desde siempre, que no se
modificarán y que están garantizadas las condiciones de seguridad para que
los negociadores de las Farc se sienten a la Mesa de Diálogo. 
Pero el grupo guerrillero insiste en que, gracias a lo que llaman recientes
facultades dadas a las Fuerzas Armadas, ³con cualquier pretexto pueden
desembarcar Fuerzas Especiales del Ejército cuando tengan información de
inteligencia sobre la ubicación de un miembro del Secretariado u otro
Comandante para darle captura y someterlo a juicio². 
Alegan que esto ya ocurrió cuando, en vísperas de la marcha al Caguán
promovida por el candidato presidencial Horacio Serpa, fueron muertos dos de
sus miembros por tropas del Ejército, en el sitio Balsillas, en plena zona
de despeje. 
Los voceros de las Farc dicen que las tropas que estaban en el área de
despeje antes de que esta fuera establecida hoy están ubicadas en
guarniciones cercanas a la zona, ³disfrazados de paramilitares².  
Lucha contra el paramilitarismo
Aseguran, también, que mientras el Gobierno no acabe con el paramilitarismo,
que ha intensificado sus acciones en las últimas semanas, no es posible
abordar el tema del cese del fuego y de las hostilidades. 
Para las Farc, es muy corto el plazo de tres meses para que ³el Gobierno
acabe con el paramilitarismo como política de Estado². Se refieren a que, al
prorrogar la zona hasta el 20 de enero, el presidente Andrés Pastrana
expresó que tres meses eran suficientes para discutir la tregua y el cese
del fuego, y para la lucha contra los Œparas¹. 
³Las Farc hemos exigido que para darle continuidad a los diálogos es
necesario combatir el paramilitarismo de Estado, y hasta ahora no hay
resultados a la vista; en cambio el Gobierno nos exige gestos de paz sin que
el Estado mueva un solo dedo para cumplir los compromisos adquiridos por el
Presidente², señalan las Farc.

El punto, que cierra el paquete de propuestas para salvar los diálogos, dice
que los tres meses de prórroga de la zona de despeje fijados por el
presidente Pastrana deben ser utilizados ³para comprobar la eficacia de las
Fuerzas Armadas en la lucha contra el paramilitarismo en todo el país², pero
especialmente en Caquetá, Meta, Guaviare, Vichada y Putumayo.


Suspender capturas

También ponen como condición el que se suspendan las órdenes de captura a
los miembros del Secretariado, dictadas por la Fiscalía en días pasados tras
condenar a cada uno de ellos a 40 años de prisión por diversos delitos. 
Reiteran que el Congreso recientemente otorgó facultades a las Fuerzas
Armadas para penetrar ³a sitios donde la Fiscalía no pueda ejercer sus
funciones judiciales, como la zona desmilitarizada², lo cual pone en riesgo
la vida de tres miembros del Secretariado que están ubicados allí. 
Terrorismo
En la comunicación, de algo más de dos páginas, los voceros dicen que tales
consideraciones son el resultado de una reunión con los mandos de los
bloques Oriental y Sur de esa organización guerrillera, y que las propuestas
allí contenidas les serán presentadas oficialmente al Gobierno Nacional. 
Tras una serie de enumeraciones sobre los riesgos que significan las
operaciones militares en los alrededores de la zona para sus negociadores ­e
incluso, aseguran, dentro de ella­ los voceros de las Farc le exigen al
Gobierno que se pronuncie sobre el calificativo de terroristas que
recientemente les dio el Departamento de Estado de los Estados Unidos. 
Tal calificativo, advierten, puede convertirse en un pretexto para ser
atacados en cualquier momento.